El objetivo de esta mesa era incluir e inspirar no solo al alumnado de Ciencias sino también a aquellos que se consideran más de Humanidades.
Uno de los mensajes clave fue que sus trabajos, existan a día de hoy o no, serán tecnológicos. Y que para usar tecnología no hace falta “ser de ciencias ni de letras”.
Los participantes hicieron hincapié en que la formación sigue siendo clave para nuestro desarrollo profesional. Aunque hay nuevas formas de aprender gracias a Internet y es nuestra responsabilidad formarnos por fuera del sistema.
Las habilidades transferibles como la autonomía, la colaboración, la comunicación o la adaptación al cambio pueden marcar una gran diferencia a la hora de encontrar un trabajo.
También la creatividad a la hora de buscar nuevas oportunidades y formas de solucionar problemas supondrá una clara ventaja.
Y hoy más que nunca se reforzó el mensaje de rodearnos de otras personas de las que aprender; entrar en acción; hacer voluntariado, viajar y aprender idiomas… pueden ser maneras de conocernos mejor a nosotros/as mismos/as y descubrir cuál es nuestro siguiente paso en la vida.